¿Qué dificultades te encontraste al llegar al país de destino?
Por mucho que siempre se diga que Dinamarca es un país donde se vive muy bien, donde las ayudas del estado son muy grandes y donde se encuentra trabajo muy rápidamente, a mí me gustaría matizarlo desde mi punto de vista.
Yo hace solamente un año (11 de mayo del 2013) que me instalé en Copenhague. Mi marido es danés y esta era la razón para escoger Dinamarca como país de destino.
Había acabado los estudios de Arquitectura en la UPC en abril del 2013 y no había un futuro muy claro para mi carrera profesional.
Una ventaja cuando llegas al país es que con el inglés te puedes mover por todos lados, todo el mundo lo habla prácticamente a la perfección. Con todo, estudiar y aprender el danés lo más rápido posible es imprescindible. Todo está escrito en danés, todo el mundo habla danés cotidianamente y es importantísimo dominarlo si te quieres sentir integrado. Al principio, cuando alguien es de fuera y no se las arregla con el danés, les hace gracia y cambian al inglés, pero pronto se cansan y si no tienes unos conocimientos básicos del idioma acabas siendo el que no se adapta ni se integra.
En cuanto al tema trabajo, aunque casi todas las empresas que tienen sucursales en distintos países trabajan en inglés, también es muy importante mostrar que se está haciendo un esfuerzo para dominar la lengua. Si eres el único que no habla danés, no suelen cambiar al inglés cuando se hacen reuniones, se come en la cantina, etc.
A pesar de estar casada con un danés, creo que integrarse en Dinamarca es bastante difícil. Las personas son muy amables pero hacer un grupo de amigos daneses es bastante difícil, ellos ya tienen su vida hecha. Muchos extranjeros acaban teniendo grupos internacionales como grupos de amigos.
Otra dificultad que encuentras al llegar tiene que ver con todos los papeles que se tienen que hacer. Moverse por el sistema no es tan fácil, y además toda la documentación que te llega está en danés -aunque eso, en mi caso, no supuso ningún problema porque mi pareja es danesa.
¿Te costó mucho encontrar el primer trabajo? ¿Cuál fue la vía para conseguirlo?
Como ya he dicho antes, soy arquitecta y hace un año que vivo en el país. De momento, todavía no he encontrado trabajo y no he tenido la oportunidad de hacer ni una entrevista. El mundo de la arquitectura no está muy bien en el país y, como hay tanta emigración, los daneses son cada vez más reticentes a ofrecer trabajo a gente que no domina el danés con un nivel satisfactorio tanto escrito como hablado.
Es muy difícil conseguir una entrevista de trabajo si no tienes una red de conexiones lo suficientemente amplia -lo que aquí llaman network. Yo, de momento, estoy dedicada al estudio de la lengua al 100%.
Una estrategia bastante buena es venir al país cuando todavía estudias, hacer unas prácticas (sin cobrar) y ya quedarte en el país, intentando que la empresa donde has hecho las prácticas te ofrezca trabajo.
En mi caso, hace dos años y medio hice unas prácticas aquí durante 5 meses, pero creo que el problema fue que tuve que volver a Barcelona para terminar la carrera. Después, cuando quise volver a Dinamarca, ya no necesitaban a ningún nuevo empleado. En cambio, cuando había terminado de hacer las prácticas sí que me habían ofrecido quedarme, pero tuve que renunciar para volver a Catalunya y terminar los estudios.
A pesar de todo, lo valoro como una experiencia buena en el mundo de la arquitectura.
¿Qué incidencia tiene el conocimiento y dominio de la lengua en las expectativas de integración?
Tal y como ya he explicado en la respuesta a la primera pregunta, pienso que tiene mucha incidencia. Querría añadir que, si tienes permiso de residencia, el estado te ofrece clases de danés gratuitas, es una muy buena oferta.
¿Cuáles son las diferencias más relevantes respecto al mundo laboral a Catalunya?
Desde mi experiencia y la de mi marido, Dinamarca, siempre que se trabaje en las mismas condiciones que un danés, es un buen país para trabajar.
La semana laboral es de 37 horas y el horario es muy bueno. Muchos despachos y bufetes de ingenieros tienen horario flexible para entrar (entre las 7h y las 10h), y el horario normal es de 8h a 16h. En general se para media hora para comer y todo el mundo come en el trabajo. El horario es muy bueno ya que te permite tener vida familiar a partir de las 17h.
El horario de tiendas también es muy bueno para el trabajador, ya que a las 18h todo el mundo está en casa. La vida aquí está muy pensada para pasar tiempo con la familia, hacer deporte o dedicarse a las actividades que cada uno encuentre interesantes.
Otra ventaja es que la jerarquía laboral es casi horizontal. Los jefes no tienen despachos propios sino que se sientan a tu lado, en la misma mesa y en una silla como la tuya. Respetan a todos los trabajadores y están abiertos a oír la opinión de todo el mundo, incluso si eres un simple estudiante que hace prácticas.
¿Te beneficiaste de acciones de acogida en el país receptor?
No, porque si eres de la UE tienes derecho a la libre circulación y por lo tanto es difícil obtener cursos de acogida.
Una vez dominas el idioma sí que puedes acceder a unos cursos que se llaman Mi primer trabajo, en los que te ayudan a elaborar el CV y a trabajar otras estrategias, todo en danés. Hay que decir que el danés es un idioma muy difícil de aprender, sobre todo para los hablantes de lenguas románicas, como el catalán o el castellano. Pienso que se necesita como mínimo un año y medio de dedicación, con unas 16 horas semanales de clase.
¿Cuál es el hábito social del país que más te ha sorprendido?
Aunque todos somos europeos y por lo tanto bastante similares, hay muchas cosas que a nosotros, de cultura mediterránea, nos sorprenden.
Una de estas cuestiones es que los daneses no son espontáneos, sino que planean todas las actividades, tanto si son de trabajo como de placer. Si quieres quedar para tomar un café o una cerveza con un amigo danés, mirarán la agenda y se lo apuntarán en el calendario, y te puedes encontrar con que para concertar un encuentro de una hora para tomar un café te digan: “Dentro de dos semanas”. Para nosotros se hace extraño y al principio cuesta muchísimo, porque no estamos acostumbrados a ello.
Otro hábito social al cual cuesta acostumbrarse es que si te haces muy amigo de un danés y esperas que te introduzca en su grupo de amigos, estás perdido. Un danés podrá ser muy amigo tuyo y podréis quedar muchas veces, pero nunca te presentará a sus amigos. Por eso, siempre tienen los fines de semana llenos, ya que quedan para cenar con una pareja un fin de semana, con los amigos del instituto otro día, con los de la universidad otro día, etc. Pero nunca mezclan grupos en un mismo evento, a no ser que se trate de una celebración como un bautizo, una confirmación, una boda, etc.
Si retrocediéramos en el tiempo, justo antes de irte, ¿qué información habrías agradecido tener?
Me habría gustado saber que, si quieres ir a vivir a Copenhague, encontrar un sitio para vivir es dificilísimo y puede ser que en un año tengas que hacer cuatro mudanzas. Por lo tanto, ¡hay que estar preparado!
También habría agradecido saber que, para encontrar trabajo, hay que tener muchos contactos, y eso pide mucho tiempo.
Finalmente, habría estado bien saber que, con menos de 1.000 euros al mes, casi no se puede vivir, aunque no se gaste mucho. I es que se debe tener en cuenta que es un país donde todo es muy caro: por ejemplo, una cerveza vale 8 euros.
Dada tu experiencia, si tuvieras que dar un consejo a quien acaba de llegar, ¿cuál sería?
Mis consejos serían estos:
- Dedica las dos primeras semanas solamente a solucionar papeles con la administración y a buscar piso.
- Además, intenta buscar piso desde Catalunya antes también, porque puede ser que tardes más de dos meses en encontrar uno.
- Cómprate una bici de segunda mano enseguida, porque será tu medio de transporte.
- Ten un muy buen dominio del inglés y, si te planteas quedarte bastante tiempo en el país, empieza a estudiar danés lo más pronto posible. Hay que decir que, para disfrutar de clases gratuitas, hay que haber hecho todos los trámites administrativos antes. Hay que tener presente también que hay varios requisitos, como disponer de fondos suficientes (unos 1.000 euros multiplicados por el número de meses que quieres quedarte en el país), que hay que cumplir para conseguir el permiso de residencia, sin el cual no se puede acceder a las clases de danés ni tampoco se puede disfrutar de la sanidad pública, abrir una cuenta bancaria, etc.